La forma más eficaz para contrarrestar la inflamación intestinal en las aves debe estar asociada con aplicar estrategias que sean compatibles con la nutrición.

La salud intestinal de las aves es importante para alcanzar una buena producción y rendimiento. Roberto Santiago gerente Técnico de Evonik (roberto.santiago@evonik.com) , sugirió algunos conceptos para que el avicultor logre el éxito en la producción de carne de pollo y huevo.

Este especialista, con más de 20 años de experiencia en la industria de alimentación animal, explicó que un intestino sano emplea entre el 20 y el 36% de la energía de su metabolismo, pero cuando está enfermo, el consumo energético aumenta del 40 al 65%, durante el periodo de inflamación producida, principalmente, por la denominada enteritis bacteriana.

Es una patología provocada por la mala digestión de alimentos, la extra suplementación de nutrientes, el incremento de bacterias, alteraciones morfológicas, estrés oxidativo, disminución de la función intestinal, alimentos con baja digestibilidad, etc. “Estos problemas ocurren en el día a día de una granja que produce carne de pollo o huevo”, afirmó.

Por ello sugirió utilizar dietas bajas en proteínas, alimentos digestibles, enzimas exógenas para aliviar la mala digestión, reducir o suprimir la proliferación de bacterias y aplicar inmunomoduladores, lo que conllevará a que se generen menos residuos de nitrógeno para que las bacterias no se desarrollen en el intestino.

También mencionó la eficacia de las vacunas que, con el paso del tiempo y la tecnología, han evolucionado y mejorado. Incluso señaló que en el mercado ya se puede acceder a procedimientos inmunológicos vectorizados que ayudan a lograr una mejor respuesta.

“Las bacterias oportunistas son las más frecuentes cuando hablamos de infección intestinal”: Roberto Santiago.

Buscar el problema
Sin embargo, Santiago aclaró que la implementación de estas u otras estrategias, no será suficiente si es que no va acompañada de una correcta investigación sobre qué es lo que le hace daño al ave o al cerdo. “Para conseguir éxito en la medicación se debe conocer el agente causal; este es un factor relevante”, apuntó.

Para el experto, los probióticos son la mejor herramienta para promover el microbioma en el intestino, pero “hay que saber elegir el probiótico adecuado que ayude a mantener la salud del intestino”. Otras estrategias son también las enzimas que ayudan a reducir la viscosidad que se produce en el alimento y el monitoreo bacteriano intestinal que son factores importantes.

Recomendó frenar el empleo de antibióticos, pues a lo largo de los últimos años han afectado tanto, a la salud humana como la animal, porque han provocado que la resistencia antimicrobiana vaya en aumento.

crobiano
La experta Anita Menconi, de Evonik (anita.menconi@evonik.com) responsable de las soluciones de salud intestinal, presentó ScreenFlox como la herramienta innovadora para el monitoreo microbiano de parvadas.

El procedimiento es sencillo: se recolecta material de heces de todo el galpón para el análisis en laboratorio y finalmente se extrapolan los resultados para todo el lote. El monitoreo evalúa el estado de salud de toda la parvada con una solución sistémica.

La herramienta ScreenFlox incluye: tubos de recolección de heces, un kit para extracción de ADN, y otro kit para ensayos cuantitativos de PCR en tiempo real.

La plataforma ScreenFlox, que desarrolló Evonik, está en capacidad de examinar bacterias como Clostridium perfringens, y Salmonella entérica. A futuro trabajan para expandirse al estudio de otros patógenos como Escherichia coli, Campylobacter jejuni y Eimeria.

La herramienta permite valorar la efectividad de los diferentes aditivos utilizados en la industria avícola, y hasta el momento ha logrado detectar patógenos relacionados con la salud de los alimentos.

Menconi detalló que se ha cuantificado más de dos mil 500 serotipos de Salmonella y más de 200 serotipos patógenos humanos, que se pueden colonizar en el tracto intestinal de los pollos. Por eso es importante detectar Salmonella y su conexión con enfermedades diarreicas en humanos, por ejemplo.